La Cirugía Estética (o también conocida como Cirugía plástica[1]) es una forma de hacer que las personas luzcan menos feas, pero lo que ellas no saben es que las termina haciendolas mucho más feas de lo que ya eran y maximiza sus defectos físicos. Sus caras terminan por hincharse, ponerse moradas o azules como los pitufos y acabar con secuelas de movimiento facial y luego mental.